Nada supera los panes y pasteles franceses frescos. Cuando estés en París, haz como los parisinos y comienza tu día en una panadería auténtica. Serás recibido por el embriagador aroma de la mantequilla, azúcar y levadura, mientras que los panes artesanales salen calientes del horno. Ya sea que prefieras una simple baguette, un croissant hojaldrado o un delicioso pan de chocolate, aquí te presentamos algunas de las mejores panaderías para deleitarte con las delicias culinarias de París:
Poilâne es famoso por su pan de masa fermentada cocido a leña. Abierta desde 1932, esta panadería familiar utiliza harina molida en molino de piedra y una fermentación natural para crear su pan característico. Sus recetas atemporales han perdurado de generación en generación. Haz una parada para una rebanada de pan o llévate un pan entero a casa.
Gérard Mulot, ubicado en Saint-Germain-des-Prés, es una institución de la repostería. Las vitrinas están llenas de éclairs, Paris-Brest, macarons y pequeños pasteles coloridos. No te pierdas su exquisito milhojas, compuesto por decenas de capas de masa fina como papel. Todo se prepara cada día con ingredientes de calidad. ¡Un lugar perfecto para golosos!
Un viaje a París está incompleto sin visitar estos templos de las tradiciones de la panadería francesa. Así que, haz como un lugareño y comienza tu mañana con una taza de café con leche y el croissant perfecto. ¡Tus papilas gustativas te lo agradecerán!
Disfruta de la cocina francesa clásica en las brasseries y bistrós
Un viaje a París no está completo sin saborear la cocina francesa clásica. Dirígete a un bistró o una brasserie acogedora y prepárate para un festín culinario.
Brasseries
Las brasseries se crearon originalmente como lugares de comida informal que servían cerveza, pero hoy ofrecen un menú completo de platos tradicionales franceses en un ambiente elegante y relajado. Opta por platos como el steak tartare, caracoles, coq au vin o la bouillabaisse. Y, por supuesto, acompaña tu comida con una copa de vino tinto fuerte o champagne fresco.
Bistrós
Para un ambiente relajado, los bistrós son perfectos. Los bistrós se enfocan en cocina sencilla y casera, utilizando ingredientes frescos y locales. Algunas recomendaciones:
Croque-monsieur: sándwich de jamón y queso asado, generalmente adornado con un huevo frito o pochado.
Mejillones en crema de vino blanco, servidos con papas fritas para mojar.
Filete con salsa béarnaise o pimienta y un lado de ratatouille.
Crème brûlée, mousse de chocolate o tarta tatin como postre.
Cafeterías en terraza
Si el tiempo es bueno, opta por un café en terraza donde podrás disfrutar del ambiente de la ciudad mientras comes. Observa a la gente pasar mientras degustas una omelette, una ensalada, una quiche o un sándwich. Saborea un espresso o una copa de vino entre platos. No hay mejor manera de sentirse como un verdadero parisino.
Una comida memorable en París es una experiencia que atesorarás durante años. ¡Buen provecho! Deléitate con todos los pasteles con mantequilla, quesos, vinos y salsas que desee tu corazón. Después de todo, siempre puedes caminar para explorar las encantadoras calles después. Cuando estés en la capital culinaria del mundo, come como los franceses.