Las ventajas que nos ofrece un almacén logístico son múltiples. Y una de las principales se relaciona con el hecho de que se puede almacenar y resguardar cualquier tipo de productos y materiales. De hecho, podemos decir que es el segundo servicio que más se delega en materia de logística, solo es superado por los servicios de transporte. Hoy día, cientos de empresas se valen de este recurso tan provechoso para mantener su correcto funcionamiento.
Funciones y actividades del almacén logístico
Un almacén logístico ha sido preparado, diseñado y organizado para llevar a cabo diferentes funciones, como por ejemplo, regular el flujo de existencias. A continuación, en esta sección te hablaremos más en detalle sobre las funciones principales de dichos centros:
Recepción
La recepción consiste en dar entrada a las mercancías que son enviadas por parte de los proveedores, y durante dicho proceso se confirma que lo recibido esté acorde con la información que se haya recibido previamente. Es importante detallar aspectos como las cantidades, las características y la calidad del producto, este debe corresponder con el pedido.
Almacenamiento
Llegados a este punto lo que se busca es ubicar la mercancía en las zonas más adecuadas. Este aspecto es importante porque no todos los tipos de productos pueden estar en un mismo lugar y bajo ciertas condiciones. Por otro lado, también se quiere que al momento de buscarlas estén al alcance, que se trate de productos localizables y que no genere complicaciones.
Conservación
Es importante resaltar que durante el tiempo que la mercancía vaya a estar en resguardo, permanezca en perfectas condiciones. La conservación implica la aplicación de la legislación vigente en lo relacionado con la higiene y seguridad en el almacén. Por otro lado, también involucra las normas especiales sobre mantenimiento y cuidado de cada tipo de producto.
Gestión
La gestión y el control de existencia forman parte de las funciones claves de un almacén logístico, y consiste en determinar la correcta cantidad de los productos que se deben almacenar, calcular todos los detalles y la frecuencia con la que será solicitado cada pedido. Todo esto se realiza con el objetivo de disminuir al máximo los costes de almacenamiento.
Ventajas de un almacén logístico
Entre las ventajas más destacadas sobre delegar el trabajo de un almacén logístico podemos destacar el ahorro. Y una muestra de eso es que en la actualidad el funcionamiento de muchos negocios es posible gracias a dichos servicios. Un ejemplo de ello son los comercios electrónicos, como no cuentan con una tienda física, delegan el almacenaje de sus productos a un almacén logístico, así no incurren en gastos de envíos o mantenimiento.Otra ventaja a destacar tiene que ver con el asesoramiento de expertos en almacenaje. La realidad es que su conocimiento es crucial para administrar la entrada y la salida de mercancía valiéndose de la automatización de los procesos de logística. Todo esto en conjunto nos lleva a la disminución de recursos, así como ahorrarnos en invertir en las mejoras de las instalaciones.Por tanto, reducimos considerablemente el tiempo y los errores en la toma de decisiones.
Empresas que delegan el servicio de almacenamiento
Sí, es cierto que muchas empresas cuentan con sus propias instalaciones de almacenamiento, pero otras prefieren optar por el servicio de almacén logístico. Por lo general dicho trabajo suele ser delegado por los comercios electrónicos, importadores y empresas dedicadas al transporte de mercancías. El fin de todas ellas es reducir los costes de sus propios almacenes o también almacenar excesos de producción.No quedan dudas de que un almacén logístico resulta de gran utilidad para un gran número de empresas, puesto que se ahorran la gestión de sus propias instalaciones y su mantenimiento. Además, la delegación de estos servicios conlleva muchas más ventajas, las cuales justifican con creces su contratación y permiten, entre otras, la existencia de nuevos tipos de negocio que actúan sólo en Internet.
